Deporte Balear

J. BAUZÀ / S. ADROVER. PALMA. No hay dinero y se impone el realismo. «Es muy difícil que cerremos algún fichaje esta semana», reconocieron ayer fuentes del club a este periódico. «Si tuviéramos dinero ya habríamos fichado a tres jugadores», explicaron estas mismas fuentes.
Ocho días después de que Mateu Alemany le cerrara las puertas de la propiedad del club a Carlos González, el Mallorca sigue sin estar en disposición de cerrar alguna contratación. Se buscan futbolistas que vengan cedidos o traspasados a coste cero. Dos condicionantes que limitan mucho el rastreo de jugadores en el mercado y que no permitirá realizar incorporaciones a corto plazo.
Gregorio Manzano aparenta tranquilidad en público, pero su discurso está barnizado de una preocupación difícil de disimular. El preparador andaluz está acostumbrado a pretemporadas difíciles con el Mallorca, pero nunca antes a estas alturas del verano había tenido tanto por reconstruir, y tan poca materia prima con la que empezar.
El año pasado por estas mismas fechas el Mallorca ya había incorporado a ocho futbolistas –Ayoze, Josemi, Mario o Keita, entre otros– la mayoría de ellos a coste cero. Por entonces la secretaría técnica del Mallorca se centraba en completar la plantilla con la contratación de un delantero centro de garantías que supliera la baja de Dani Güiza. El elegido fue Aritz Aduriz, que llegó pocos días antes de que arrancara la competición liguera después de que Grande se comprometiera a pagar seis millones de euros al Athletic por su traspaso.
La plantilla mallorquinista consta en la actualidad de dieciocho futbolistas profesionales, todos los que formaron parte del equipo el año pasado excepto Jurado, Cléber, David Navarro, Scaloni, Arango, Moyà y Callejón, al que el club cedió al Albacete la semana pasada.
Otros futbolistas como Víctor, Óscar Díaz o Javi Guerra no entran en los planes de Manzano, pero el club dilata sus salidas hasta no haber contratado refuerzos.
La institución ha perdido todo el mes de julio enfrascada en el irresuelto proceso de venta del club y ahora se ve abocada a sumergirse en un mercado en el que las mejores oportunidades y las primeras opciones que estaban sobre la mesa de Nando Pons se han esfumado. Ya sólo queda armarse de paciencia para tratar de pescar entre los descartes de otros equipos. Eso sí, a coste cero y sin margen para el error.

El Salamanca quiere a Guerra

El Salamanca se ha interesado por los servicios de Javi Guerra, pretendido también por el Recreativo de Huelva. El delantero, que la pasada temporada marcó nueve goles con el Alavés, apenas ha tenido participación en Kössen y el club desea traspasarlo. El problema es que ambos equipos prefieren una cesión al no disponer de dinero para fichar.

Informa: Deporte Balear  fuente:  diario de ibiza