Deporte Balear

Los administradores detectan anomalías en las cuentas y aplazan un mes la reunión para a revisarlas

Las cuentas no salen. No cuadran. Los administradores concursales han estudiado el estado de las finanzas del club y no les ha gustado lo que han visto. Ayer tomaron una decisión de gran calado: forzar a Vicenç Grande a suspender la Junta de Accionistas prevista para esta mañana en la que iban a aprobarse las cuentas.»Hemos pedido al Consejo que suspenda la Junta porque hemos detectado una serie de irregularidades en las cuentas del club«, señalaron ayer a este diario fuentes judiciales, aunque no quisieron precisar de qué tipo de irregularidades se trata. «Afectan a los resultados del presente ejercicio, aunque podría tratarse de simples errores contables», explicaron estas mismas fuentes.
La entidad balear tiene una deuda de 51 millones de euros, y era previsible que las cuentas no cuadraran. Lo que sorprendió es que Raimundo Zafirteza, Jorge Sáinz de Baranda y Salvador Fornés tomaran una decisión tan radical. Los administradores llevaban tres semanas estudiando exhaustiva de las cuentas de la entidad.
Ahora se abre un plazo de un mes para repetir una auditoría por si, efectivamente, las irregularidades detectadas no fuerna más que errores contables. Hasta ese momento no se podrá volver a convocar una nueva Junta.
La iniciativa de los gestores supone un duro revés para Vicenç Grande, en un momento en el que está más cuestionado que nunca y con un crédito bajo mínimos. La cita de mañana estaba marcada en rojo en el calendario del Mallorca. Se preveía una reunión muy movida en la que varios accionistas habían anunciado que recriminarían a Grande en persona su gestión al frente de la entidad. Quizás por ello Grande decidió días astrás no asistir a la Junta de Accionistas, lo que enervó los ánimos todavía más.
Las cuentas iban a salir adelante porque Grande ostenta el 93% de las acciones. Sin embargo, varios accionistas ya habían anunciado en privado que iban a rechazarlas como gesto simbólico para manifestar su descontento por cómo se han ido sucediendo los acontecimientos en el club.
La gota que colmó el vaso fue la intención de Grande de nombrar a su amigo y socio Joan Antoni Ramonell presidente ejecutivo del Real Mallorca.

Informa:deportebalear.com /fuente:diariodemallorca.es

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