El Bàsquet Mallorca se estrella en su debut

20 septiembre 2008 | Por Redacción | Categoria: Baloncesto

La defensa de un ordenado Melilla desquicia a los de Sastre

Jan Orfila lanza a canasta ante la oposición de un jugador del Melilla.  Foto: B. Ramon.

El Bàsquet Mallorca tuvo un aciago debut ante un buen y práctico Melilla. El cuadro inquer jugó una buena primera mitad para hundirse a partir del descanso, rozando el esperpento. El conjunto de Xavi Sastre tuvo una gran entereza defensiva en el primer acto y forzó al Melilla a numerosos errores y pérdidas. Eso le permitía correr y contrarrestar el poder interior de los norteafricanos, que en la mayor parte del encuentro iban mandando en el electrónico.

La selección de tiro mallorquina era muy errática pero la omnipresencia de Blair y Alzamora en el rebote ofensivo alimentaban el marcador a golpe de segundas opciones.
En el segundo acto los mallorquines lograron tomar la delantera 26-25 tras un parcial de 7-0 y un gran rigor defensivo. Pero el ataque minaba las posibilidades locales de ganar ya que no daban el golpe de autoridad. Por eso el Mellila retomó el mando con un 0-8. Desde la defensa, Blair y Tiedeman acudirían al rescate para forzar las tablas (40-40 al descanso). En la reanudación, un triple de Riera iba a dar la última ventaja al Mallorca (43-40), que a partir de ahí se hundiría. Las defensas alternativas ordenadas por Olmos provocaron el cortocircuito en los dicípulos de Sastre, que una y otra vez se estrellaban contra la muralla defensiva visitante. La zona anuló por completo a los mallorquines, que desaparecieron como equipo a pesar de los conatos de Sastre para alargar la vida de su equipo. Sin guión y con los papeles mojados, la desventaja llegaba a los 15 puntos en la bocina del tercer acto (54-79). Esta vez ya no había épica ni milagro. Sólo la lógica aplastante de un Melilla que se vio envalentonado y que desde el perímetro cercenó cualquier posibilidad de remontada. Tres andanadas colocaban la ventaja en 24 puntos. Y lo peor es que en cuatro minutos los mallorquines no habían olido el aro rival.
Sastre tuvo que reconocer al final la superioridad de su adversario. El técnico mallorquín admitió: «Sabíamos lo que nos podían hacer con sus defensas alternativas y no supimos reaccionar. La zona nos ha hecho mucho daño y provocado muchas pérdidas». El Mallorca que en 20 minutos sólo había perdido tres balones, dilapidó 13 en los otros 20 y la selección de tiro, que era discreta al descanso, empeoró ostensiblemente cuando el equipo se tornó guerrilla.

BÀSQUET MALLORCA 69: Riera (8), Blanch (17), Tiedeman (9), Blair (17), Orfila (6); Alzamora (0), Bivià(4), Keep (49, Sastre (0), y Pampín (4). 18/37 T2, 6/23 T3, 15/20 TL, 30 rebotes (12 ofensivos) 16 pérdidas y 12 faltas.

MELILLA 89: Cirociari (79, Fergerson (15), Juanma Ruiz (9), Victor (10), Caio Torres (12); Waleskowski (19), Lázaro (0), Héctor García (9), Romero (3), Huertas (5). 26/·39 T2, 10/21 T3, 7/8 TL, 26 rebotes (7 ofensivos), 17 pérdidas y 20 faltas.

Parciales: 19-23, 21-17, (40-40), 14-29, 15-20.
Árbitro: Martínez Prada y Carpallo Miguélez. Bien.

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